En el caso de los padres primerizos, muchas de las dudas referentes al cuidado del bebé recién nacido surgen los primeros días, con la llegada a casa después de haber salido del hospital. Poco a poco los padres se van habituando a la nueva situación, adquiriendo mayor confianza y seguridad en esta primera etapa.
De todas formas, indicamos las dudas más frecuentes que se suelen tener para saber cómo manejar la situación y conocer mejor las características del bebé y sus cuidados en estos primeros días.
Piel
Es habitual observar descamación en la piel de los bebés, sobre todo en el tronco y las extremidades. Es algo que normal que mejora en pocos días y se debe al tiempo que el bebé ha permanecido en el líquido amniótico.
La piel del bebé es sumamente delicada, por lo es aconsejable utilizar siempre ropa de algodón, lavarla antes del primer uso y siempre con detergente suave especial para bebé, y en caso de utilizar crema hidratante, que sea de base vegetal (como aceite de almendras), no mineral (como glicerina y similares..)
Muchos recién nacidos tienen una mancha de color oscuro en la parte baja de la espalda que parece un hematoma suave. Se conoce como mancha mongólica. Desaparece por sí sola en los primeros años y no hay que darle importancia ni quiere decir que le ocurra nada.
Los recién nacidos también suelen tener manchas rojizas en la piel, alrededor de los párpados, frente o nuca normalmente que también desaparecen por sí solas con el paso del tiempo en pocos meses.
Puede que le salgan los primeros días unos pequeños granos blanquecinos que recuerdan a las pústulas del acné, en la nariz, las mejillas y la barbilla. Se conocen como miliaria. No tienen importancia ni requieren cuidados.
Cambio de pañal
Para evitar la aparición de la dermatitis del pañal se deben seguir los siguientes consejos:
- El pañal debe cambiarse muy a menudo, ya que cuanto más humedad haya y por más tiempo en la zona, aumentará la probabilidad de aparición de infección.
- Debe cambiarse siempre de inmediato en el caso de que el bebé haya hecho caca.
- Siempre que sea posible lo más recomendable es limpiar la zona del culete con una esponja húmeda y escurriéndola bien, pasándola suavemente. Previamente se pueden retirar las heces con toallitas deshechables, pero el aclarado final debe hacerse con la esponja humedecida en agua y bien escurrida.
- Después de limpiar, hay que dejar secar muy bien la zona al aire, de forma que cuando se ponga el pañal ya no quede humedad. Secar rápidamente con una toalla o paño no es suficiente.
- Prueba diferentes marcas de pañales para ver cuál le va mejor a tu hijo. En el tema de pañales, generalmente los más caros también son los de mayor calidad, ya que reducen la humedad y evitan en gran medida la aparición de dermatitis, por lo que suele merecer la pena pagar un poco más.
- No obstante siguiendo cuidadosamente los anteriores consejos, no debería surgir este problema y el culete del bebé estará siempre bien cuidado.
Uñas
Generalmente los recién nacidos tienen las uñas largas y rotas en los extremos, que pueden hacer que se arañen o se lastimen la cara si se tocan con ellas. No hay ningún problema en cortárselas con cuidado, empleando siempre unas tijeras de punta redondeada que hay especiales para bebés. Conviene aprovechar para ello los momentos en que esté más tranquilo, como puede ser cuando está dormido.
Si los padres aún no se sienten seguros para utilizar tijeras, pueden limárselas un poquito.
Ombligo
Los consejos del cuidado del cordón umbilical hasta su caída han ido cambiando mucho a lo largo del tiempo. Y en cada maternidad es posible que le indiquen un procedimiento a seguir.
Una de las últimas recomendaciones que se están siguiendo es no mojarlo ni aplicar nada para que se seque y desprenda cuanto antes. Durante estos días se puede asear al bebé mediante una esponja o paño húmedo para no humedecer esa zona.
Unicamente hay que enrollar el cordón con una gasa estéril cada vez que se cambie el pañal, se realice el aseo del bebé, y muy importante siempre que se moje o se ensucie. Se desprenderá por si sólo entre el 5ª y 10º día.
Hay que vigilar siempre que no se produzca infección en la zona del ombligo, en cuyo caso hay que acudir de inmediato al médico y seguir sus indicaciones.
En el caso de que se quedara adherida la gasa al cordón, hay que mantener la calma, ya que el bebé llorará bastante por el dolor, y aplicar suero fisiológico para humedecer un poquito esa zona y conseguir que se desprenda sin hacer daño al bebé.
Genitales
En el caso de los varones, es normal que exista fimosis. La fimosis es una situación normal a esta edad que no requiere ninguna intervención, siendo desaconsejable la realización de retracciones forzadas de la piel.
En las niñas es frecuente hallar unos labios mayores abultados. En los pliegues entre los labios mayores y menores aparecen unos restos blanquecinos (restos del vernix caseoso, sustancia untuosa blanquecina que recubre la piel del bebe en el momento de nacer). Esta sustancia está muy adherida y a veces requiere de sucesivos lavados suaves para desaparecer.
En ocasiones puede apreciarse la salida por el orifico vaginal de una secreción mucosa, consecuencia, como en el caso de las mamas, de la influencia de las hormonas maternas.
A veces, tras unos días, puede incluso producirse un pequeño sangrado por la vagina (una pequeña menstruación) que debe considerarse normal.
Ojos
Para la higiene de los ojos, se puede aplicar simplemente unas gotitas de suero fisiólogico, secando con una gasa estéril. Sólo en el caso de observar alguna anomalía o secrección (a veces se obstruye el conducto lagrimal) es necesario consultar con el pediatra.
Los recién nacidos aunque son capaces de ver desde el nacimiento, sólo pueden enfocar la imagen hasta una distancia de 20 ó 30 cm, por lo que son capaces de apreciar con nitidez el rostro de su madre.
¿Es normal que tenga hipo o estornude siendo tan pequeño?
Es totalmente normal que los niños recién nacidos realicen actos tan frecuentes en los adultos como son tener hipo, estornudar, o hacer pequeños ruidos nasales y con la boca.
Los estornudos por ejemplo no quieren decir que tenga frío o se esté acatarrando como se pensaba antiguamente, sino que los utilizan como medio para despejar las vías nasales y respirar así mejor. De hecho, está totalmente contraindicado abrigar en exceso a un bebé.
Simplemente hay que observar tranquilamente al bebé, asegurándonos de su bienestar y de mantener cubiertos sus cuidados y necesidades.
La importancia de las rutinas en el bebé
Dado que su patrón de sueño-vigilia no está nada regulado teniendo ciclos de sueño y actividad variables a lo largo del día, conviene ir habituándoles poco a poco a una rutina, como por ejemplo:
- Adecuar los estímulos de ruido y luz a las diferentes horas del día: De esta forma, aunque el niño duerma su siesta durante el día, se pueden realizar ruidos cotidianos en casa y debe dormir con luz, y por la noche, respetar el silencio para que empiece a diferenciar los ritmos diferentes de día y que la noche es para dormir.
- Realizar el paseo y baño por tarde siempre a la misma hora, de forma que vaya adquiriendo poco a poco la rutina: paseo-baño-cena-dormir.
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